"Dado que la cinta de John Milius está en una categoría muy alejada de este videoclub casposo y entrañable, ahora solemos decir que es muy mala. Pero en sus tiempos "Conan the destroyer" era la que de verdad molaba, mientras la de Milius, sin dejar de ser la Reina, quedaba para los snobs y los buscadores espiritualistas. De hecho, una de las grandes riquezas aportadas por esa cultura del videoclub de los ochenta fue todo un filón de películas de bajo presupuesto y temática hiperbórea que -bajo el calificativo de "espada y brujería" -reproducían una y otra vez el mismo viaje del héroe ario, fomentando el cultivo de la salud corporal y haciendo de la vida un viaje de crecimiento en espíritu y en valor; los protagonistas caminan por bosques, bucean en las aguas, recorren desiertos, montañas o grutas, cabalgan, luchan con la espada contra los brujos y contra los falsos dioses, siempre luciendo un cuerpo rebosante de salud y fuerza. Grace Jones, una acojonante actriz negra, tuvo aquí algunos de sus mejores momentos"
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